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 Job describe el castigo de los malos 
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Reasumió Job su discurso, y dijo: 
 2 
Vive Dios, que ha quitado mi derecho,
  Y el Omnipotente, que amargó el alma mía,
 3 
Que todo el tiempo que mi alma esté en mí,
  Y haya hálito de Dios en mis narices,
 4 
Mis labios no hablarán iniquidad,
  Ni mi lengua pronunciará engaño.
 5 
Nunca tal acontezca que yo os justifique;
  Hasta que muera, no quitaré de mí mi integridad.
 6 
Mi justicia tengo asida, y no la cederé;
  No me reprochará mi corazón en todos mis días. 
 7 
Sea como el impío mi enemigo,
  Y como el inicuo mi adversario.
 8 
Porque ¿cuál es la esperanza del impío, por mucho que hubiere robado,
  Cuando Dios le quitare la vida?
 9 
¿Oirá Dios su clamor
  Cuando la tribulación viniere sobre él?
 10 
¿Se deleitará en el Omnipotente?
  ¿Invocará a Dios en todo tiempo?
 11 
Yo os enseñaré en cuanto a la mano de Dios;
  No esconderé lo que hay para con el Omnipotente.
 12 
He aquí que todos vosotros lo habéis visto;
  ¿Por qué, pues, os habéis hecho tan enteramente vanos?
 13 
Esta es para con Dios la porción del hombre impío,
  Y la herencia que los violentos han de recibir del Omnipotente:
 14 
Si sus hijos fueren multiplicados, serán para la espada;
  Y sus pequeños no se saciarán de pan.
 15 
Los que$de él quedaren, en muerte serán sepultados,
  Y no los llorarán sus viudas.
 16 
Aunque amontone plata como polvo,
  Y prepare ropa como lodo;
 17 
La habrá preparado él, mas el justo se vestirá,
  Y el inocente repartirá la plata.
 18 
Edificó su casa como la polilla,
  Y como enramada que hizo el guarda.
 19 
Rico se acuesta, pero por última vez;
  Abrirá sus ojos, y nada tendrá.
 20 
Se apoderarán de él terrores como aguas;
  Torbellino lo arrebatará de noche.
 21 
Le eleva el solano, y se va;
  Y tempestad lo arrebatará de su lugar.
 22 
Dios, pues, descargará sobre él, y no perdonará;
  Hará él por huir de su mano.
 23 
Batirán las manos sobre él,
  Y desde su lugar le silbarán.
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